Día histórico: arranca el sistema de Juicio por Jurados en Santa Fe

La provincia de Santa Fe inicia este lunes 9 de junio un hito en su historia judicial: la puesta en marcha del sistema de Juicio por Jurados. El debut será en los Tribunales de San Cristóbal, donde se juzgará un caso penal por homicidio calificado y tentativa de femicidio. El tribunal estará integrado por 12 jurados titulares y 2 suplentes, todos seleccionados al azar del padrón electoral. Ciudadanos sin formación legal tendrán la responsabilidad de determinar la culpabilidad o inocencia del acusado. Se trata de un paso significativo hacia un sistema judicial más participativo, transparente y democrático.

La implementación se enmarca en la Ley N.º 14.253, sancionada el 21 de marzo de 2024 y promulgada el 27 del mismo mes mediante el Decreto N.º 418 firmado por el gobernador Maximiliano Pullaro. Esta normativa establece el juicio por jurados para delitos penales considerados graves, como homicidio calificado, robo seguido de muerte, abuso sexual seguido de muerte y enfrentamientos armados entre fuerzas de seguridad y delincuentes.

“El juicio por jurados está consagrado en la Constitución Nacional desde 1853, y Santa Fe se suma ahora a otras provincias que ya lo aplican, como Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Río Negro, Chubut y la Ciudad de Buenos Aires”, destacó el secretario de Justicia provincial, Santiago Mascheroni. Según el funcionario, este nuevo esquema “democratiza la justicia al permitir que la sociedad juzgue a sus pares” y representa “un verdadero cambio de paradigma”.

Un modelo con participación ciudadana directa

El sistema santafesino contempla la participación de 12 ciudadanos titulares y 2 suplentes en cada juicio, todos sin vínculo con el Poder Judicial, fuerzas de seguridad o formación jurídica. Están excluidos los abogados, escribanos, funcionarios públicos, militares, policías, personas con antecedentes penales, menores de edad, mayores de 76 años, madres lactantes y cualquier persona con relación directa con las partes involucradas en el proceso.

Mascheroni subrayó que no se necesita formación legal para integrar un jurado. “El rol de quienes participan es escuchar a las partes, evaluar la prueba presentada, seguir las instrucciones del juez y deliberar hasta alcanzar una decisión. Aunque no es tarea sencilla, confiamos en la responsabilidad cívica de los ciudadanos”, señaló. La ley establece que el veredicto debe ser unánime, pero si no se alcanza el consenso total, se admite una mayoría agravada de al menos 10 votos para declarar culpabilidad.

Es importante remarcar que los jurados no fijan la pena del acusado: una vez determinado el veredicto de culpabilidad, es el juez técnico quien impone la sentencia correspondiente.

Cómo será el primer juicio con jurado

Respecto del caso que inaugurará el nuevo sistema, Mascheroni detalló que en la audiencia de selección de jurados intervienen el Ministerio Público de la Acusación, la defensa y, si corresponde, la querella. De un grupo de 36 personas previamente convocadas, se eligen a los 12 titulares y 2 suplentes, respetando criterios de paridad de género. Durante el juicio, el jurado se ubicará en un estrado específico, recibirá indicaciones del juez y deliberará hasta llegar a una decisión sobre la culpabilidad.

“La puesta en funcionamiento del juicio por jurados es también un proceso de formación ciudadana. No partimos de una idea de infalibilidad, porque somos humanos, pero confiamos plenamente en el compromiso de quienes integren el jurado”, afirmó el secretario de Justicia.

Garantías para los jurados

El procedimiento garantiza los derechos de los ciudadanos convocados. Participar como jurado es una carga pública, similar al voto obligatorio, y se contemplan mecanismos como viáticos por traslado, resguardo laboral durante el proceso y una remuneración diaria cercana a medio jus, la unidad que regula los honorarios judiciales.

El nuevo sistema se aplicará de forma gradual en toda la provincia. Luego de San Cristóbal, la experiencia se extenderá a Rafaela, Reconquista, Venado Tuerto, y finalmente a las principales ciudades como Santa Fe y Rosario.

Con este nuevo esquema, Santa Fe da un paso firme hacia una justicia más accesible, en la que la ciudadanía se convierte en protagonista en la resolución de delitos graves. “Este es un hecho inédito que marca el comienzo de una etapa más participativa en la historia judicial provincial”, concluyó Mascheroni.