Cayó un santafesino buscado por narcotráfico: lo investigaban por media tonelada de marihuana y vendía choripanes en barrio Sur
Hugo Marcelo M., un vendedor de choripanes de 47 años, fue detenido en las últimas horas por efectivos de la División Búsqueda de Prófugos de la Policía Federal. Estaba prófugo desde hacía años en el marco de una causa por narcotráfico en la que se investiga el hallazgo de más de 500 kilos de marihuana en la provincia de Misiones. Según informaron fuentes del caso, el hombre fue localizado y arrestado en Santa Fe, donde atendía un puesto callejero de comida en la esquina de Monseñor Zaspe y avenida Freyre, en pleno barrio Sur.
El detenido estaba implicado en una causa federal que sacó a la luz una red narco con ramificaciones en fuerzas de seguridad. La organización criminal estaba liderada por Edgardo Oscar “Cabezón” Baigoría, quien al momento de los hechos se desempeñaba como sargento de la policía provincial. La banda contaba, además, con la colaboración de integrantes de la inteligencia de Gendarmería Nacional, quienes luego también fueron procesados por filtrar información sensible a los narcos.
La ruta de la marihuana
El caso que motivó la detención se remonta al 8 de julio de 2016. Ese día, y según reconstruyó la investigación impulsada por el fiscal federal Walter Rodríguez, un grupo compuesto por Baigoría, Lucas Gastón Da Silva, Daniel Alejandro Fedorichek y Hugo Marcelo M. organizó el transporte de 561,068 kilos de marihuana desde la localidad de Apóstoles, en Misiones, hasta la ciudad de Santa Fe.
La droga fue cargada en 742 envoltorios rectangulares y acondicionada en la caja de una camioneta Ford Ranger, conducida por Fedorichek. Como parte de la logística del traslado, se sumó un Suzuki Fun rojo en el que viajaban Baigoría, Da Silva y M., quienes actuaban como “punteros”, es decir, encargados de detectar y alertar sobre controles policiales en la ruta.
Sin embargo, el operativo se vio frustrado por una investigación paralela que se tramitaba en el Juzgado Federal N°4 de Rosario, a cargo de Marcelo Bailaque. En ese expediente, se seguía de cerca a proveedores de estupefacientes de Misiones que operaban con narcos de Rosario. Con esa información, agentes policiales viajaron a Misiones para interceptar el envío.
Cerca de las 00:30 de aquel 8 de julio, el Suzuki Fun fue detectado en la ruta provincial 10, en su cruce con la ruta 4, y comenzó a ser perseguido. La camioneta Ford Ranger logró evadir el cerco y se internó en un camino rural, donde finalmente se descartó el cargamento. Horas después, la policía local halló los 500 kilos de marihuana abandonados en ese paraje.
Detenciones, liberaciones y una historia que se reactivó
En un primer momento, tanto Baigoría como Fedorichek y Hugo Marcelo M. fueron detenidos. Sin embargo, como aún no había pruebas suficientes que los vincularan directamente con la droga incautada, el juez Bailaque ordenó su liberación y la devolución de los teléfonos secuestrados.
Según las fuentes judiciales, el detenido declaró recientemente ante el juez federal Aldo Alurralde que “nunca estuvo prófugo” y que no recibió citación judicial alguna. “Estuve en la calle trabajando”, habría dicho durante la audiencia, en la que fue formalmente imputado como “puntero” en el operativo de traslado de marihuana.
Una organización con conexiones policiales
Dos años después de ese episodio, la figura de Baigoría volvió a emerger. Fue detenido en el marco de otra investigación encabezada por Gendarmería Nacional, que lo sindicó como jefe de una organización narco con base en Santa Fe y Santo Tomé. Se le atribuyó la coordinación del tráfico de drogas desde las fronteras con Bolivia y Paraguay hacia el centro del país, entre ellos, el cargamento frustrado en Apóstoles.
Ese expediente también reveló una red de complicidades dentro de Gendarmería. Tres agentes —Damián “El Perro” Sosa, Ismael Britos y Santiago Alejo— fueron arrestados e imputados por brindar información privilegiada al grupo de Baigoría. Además, fue detenido el narco rosarino Emanuel González, que operaba en la zona de Santo Tomé al momento de los hechos.
Con la detención de Hugo Marcelo M., uno de los últimos prófugos vinculados a ese operativo, la causa judicial por el frustrado traslado de media tonelada de marihuana suma un nuevo capítulo. Mientras tanto, la Justicia federal continúa investigando los vínculos entre organizaciones delictivas y sectores de las fuerzas de seguridad.