La crisis bancaria de EE.UU., explicada

El economista Ignacio Trucco analiza los alcances y la perspectiva para el sistema financiero mundial.

El economista Ignacio Trucco analiza los alcances y la perspectiva para el sistema financiero mundial.

 

En los últimos días se conoció la noticia de que el banco de Silicon Valley entró en quiebra. Esto generó dudas de todo tipo, tanto por las razones que motivaron esta quiebra como por las posibilidades de extensión de este tipo de riesgo a todo el sistema bancario norteamericano y, por lo tanto, a todo el sistema financiero internacional.

Sobre el primer punto, se pueden decir algunas cosas para aclarar la situación: en particular, se supo que el banco de Silicon Valley, que estaba dedicado básicamente a la financiación de proyectos de inversión en sectores de alta tecnología., tenía una cartera en títulos de plazos largo de maduración y expuestas al riesgo de los movimientos de la tasa de interés. Básicamente, acumularon títulos públicos, cuyo precio depende de su cotización en el mercado y estos perdieron terreno en los últimos años.

Ante una situación crítica como la que vive el mundo desde hace por lo menos un año, la bajada de los precios de los títulos, suponía un potencial riesgo patrimonial a este tipo de bancos.

Según distintos analistas especializados en la materia, este banco en particular no había tomado medidas adecuadas para  dar cobertura a este tipo de riesgo en un contexto de crisis de liquidez. Esta situación habla del problema de la insolvencia del banco particular y a otros casos similares que se encontrarían en una situación también de baja cobertura.

No obstante, ello no implica que no existan consecuencias sistémicas o relaciones con un problema sistémico a nivel general.

¿Por qué aumenta la tasa de interés?

Desde los últimos años a esta parte venimos viendo un comportamiento que es característico de las crisis de liquidez, que es básicamente el aumento sistemático de la tasa de interés. Aumenta la tasa de interés porque el sistema financiero está cada vez más reticentes a tomar riesgo. Incluso títulos de largo plazo, prefiriendo, títulos de corto o directamente el dinero líquido. En general eso motiva la venta de títulos, con su consecuente caída del precio y su consecuente aumento de la tasa de interés.

Este contexto es crítico para todo el sistema. Se trata de una situación de estrechez financiera. De tensión deflacionaria en el mercado bonos que han sido compensadas por el aumento de los precios de los bienes a partir de los aumentos en los insumos energéticos y alimentos. Incluso, uno de los aspectos clave que ha evitado que esta extensión de esta crisis de estrechez financiera, o limitación en la capacidad de crédito ante la falta de predisposición a la toma de riesgo, fue precisamente la existencia de inflación internacional. La inflación de costos desalienta la tenencia de dólares líquidos en la cartera.

Nos encontramos entonces frente a una paradoja: una eventual caída en los precios internacionales de los alimentos y de los comodities, que desacelera el proceso inflacionario internacional, puede desembocar en un aumento repentino y súbito al alza de la tasa de interés internacional de corto plazo.

No obstante, no podemos asumir que estamos en una situación equivalente a la del 2008/2009, en donde los activos de prácticamente todo el sistema financiero internacional estaban comprometidos. Debemos ver, en el futuro, cómo evolucionan la situación y cuál es el alcance y la profundidad de esta crisis.

 

 * Ignacio Trucco es doctor en Economía, docente e investigador en el CONICET, UNL y UNER.

 

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